Un pico con una buena subida y unas muy buenas vistas. ¿Quieres ver el Aneto desde más cerca?. Sube conmigo al Montcorbison.
DESCRIPCIÓN DE LA RUTA. ¡EMPECEMOS A CAMINAR!
Empiezo a caminar muy pronto, con las primeras luces empezando a salir por el horizonte.
Cojo una pista ancha que hay justo al lado de la única edificación que hay cerca del aparcamiento, rodeándola por la izquierda.
La pista es de pendiente ascendente continua y, para empezar, está bien…luego ya vendrá lo “bueno”…
Tengo el pico siempre justo delante de mí, por lo que la orientación es fácil: siempre hacia él.
A medida que voy subiendo, voy entrando y saliendo de bosques que me tapan un poco las vistas del entorno, pero en cuanto puedo, hecho la mirada hacia atrás y miro lo que voy subiendo.
El sendero es estrecho y, pasado una zona donde unas vacas pasturando, éste se “pone serio” y es aquí donde hay que poner 1ª, sacar la paciencia a trabajar, pasitos cortos y subir dirección el pico.
Cada vez que me paro para coger aire y descansar algo, aprovecho para inmortalizar el paisaje verde y espectacular. Los picos de las montañas de alrededor ya se van poniendo a la altura de mis ojos.
La ladera de la montaña se va quedando cada vez más pelada, habiendo solo un grupo de árboles en el punto dónde coincidiré en el camino de regreso.
Los últimos metros antes de llegar a la cima se hacen algo más pendientes, algo a tener en cuenta, pero en cuanto empiezo a ver la construcción de la cima, mi cuerpo se alegra.
El pico en sí, Montcorbison, no está donde se encuentran estas edificaciones, sino un poco más adelante, bajando una pequeña loma y subiendo otra (no hay ni marcas ni punto geodésico).
Desde allí las vistas son geniales y al Rey de la Zona no lo veo hasta casi llegar a la propia cima. Luce bien el Rey con su manto blanco…el Aneto es único…
Fotos y video de rigor y para abajo por un trozo de sendero que he subido.
Llego hasta la zona de los árboles y giro a la izquierda.
A partir de ahora, tengo otras vistas, geniales también, y el sendero se irá transformando en zonas con piedras, con pendiente más pronunciada, una zona en la cual casi desaparece, más ancho….
Hasta llegar a un camino que se podría decir como general en el que un cartel me indica que me queda poco más de 1 km. para llegar hasta la Bassa d’Oles.
A partir de aquí, todo es entre bosques y claros hasta llegar a la pista que cogí al principio y, tras unas cuantas curvas, llego otra vez al aparcamiento.
Si le haces caso a los kms. de distancia, la ruta te puede parecer fácil. Pero si combinas distancia, metros de desnivel y te digo que todos esos metros positivos te los encontrarás en la primera parte de la ruta (en la ida y en los primeros 3 kms.) entonces la ruta no es tan sencilla como parecía.
Vale la pena “sufrir” un poco esa subida, hacerla con calma y disfrutar de unas vistas tan espectaculares de la zona, ver Vielha desde lejos y ver al Rey de la Zona en todo su esplendor.
Aconsejada para hacerla con niños acostumbrados a hacer montaña y que no les sorprenda hacer esos metros de desnivel positivos al principio.
MATERIAL QUE LLEVO EN MIS RUTAS DE MONTAÑA:
A mi me matan las subidas, prefiero más kilómetros pero en llano o con poca pendiente. Claro que cuando haces cumbre las vistas y la sensación de haber llegado son toda una recompensa. Saludos Rafa.
Hola Antonio,
Si no te gustan las subidas, esta ruta no te la recomiendo je,je, ya que la subida al pico es corta y con mucha pendiente.
Es toda una recompensa por altura y por vistas.
Venga, anímate, y empieza a subir un poquito y verás qué recompensas más buenas tienes.
Un abrazo!