Época de esquiar, época de frío, época de excursiones, época de nieve…Sobre ésta última, ¿te habías parado alguna vez en observarla de estas forma?
Es normal que cuando vamos a la montaña en época de nieve, nos fijemos sólo en la que pisamos, en la de las montañas a lo lejos, en la próxima que utilizaremos para hacer una bola y tirársela a nuestros amigos… pero pocos somos los que nos fijamos, y más con cámara en mano, en esa nieve que se queda en las ramas de los árboles, como suspendida esperando a que los rallos del Sol la funda y caiga al suelo en forma de agua.
Sus formas, colores y transparencias son singulares y creo que vale la pena pararse a observarlas un momento.
Si nunca lo has hecho, te animo a que lo hagas y me comentes cómo te han quedado.








