¡Vaya doblete más bonito y “fácil” de hacer!. Sabrás de qué te estoy hablando si continuas leyendo y te transportarás al Gra de Fajol y Bastiments.
Me voy a permitir el “lujo” de decir que esta ruta es “fácil”, entendiendo como “fácil” en lo referente a la parte técnica. Porque la veo así y, sobre todo, por la parte que el paisaje, el entorno y el clima, hizo que la ruta fuera fácil y agradable.
DESCRIPCIÓN DE LA RUTA. ¡EMPECEMOS A CAMINAR!
La ruta la empiezo en uno de los aparcamientos en una de las curvas de la carreta que va desde Setcases hasta la estación de esquí de Vallter 2000 (Girona).
La temperatura se podría decir que es algo más baja de lo ideal (3º)… un poquito de fresquito, je,je.
Dejo la carretera y cojo el senderó medio ancho, boscoso y pedregoso que me lleva hasta el refugio de Ull de Ter.
Pasado éste, paso a una zona mucho más ancha de vistas y dejando atrás el bosque. Desde allí, ya puedo ver al Rey de la zona, Bastiments, y un poco más a la izquierda, la collada más famosa de entre aquelles sierras: El Coll de la Marrana.
La subida hasta allí hay que cogérsela con algo de paciencia, ya que al principio el senderó es recto y con poca inclinación ascendente, pero luego se transforma , a medida que me acerco a la collada, en un serpenteante senderó pedregoso.
Llegado al Coll de la Marrana, mi primer objetivo es Gra de Fajoll. Para ello, he de girar a la izquierda y emprender otra pala vertical con un sendero marcado.
La llegada al pico es cómoda, ya que los últimos metros son más planos.
Las vistas desde allí son geniales, pudiendo ver el Gra de Fajol Petit a la derecha y Coll de la Marrana y Bastiments a la izquierda.
Fotos y vídeo de rigor y para abajo.
La bajada la hago por el mismo senderó hasta llegar al Coll de la Marrana.
Allí, me armado de fuerza y paciencia, y emprendo el camino hasta Bastiments.
El siguiente tramo hasta llegar al pico, es de pendiente ascendente progresiva, con un último tramo con algo más de pendiente y piedras.
En la cima, muy alargada y rocosa, me encuentro con tres puntos alejados entre ellos, casi “obligados” a visitar: la Cruz (donde todos nos hacemos la foto); el punto geodésico un poco más adelante de la cadera y ya en la parte más plana; y el Piolet y el Esquí que está al final de la cadena.
Vistos estos puntos, vuelvo por la cadena hasta la cruz y me dirijo a la izquierda, dirección Coll de la Geganta. De camino hasta allí, me topo con un pequeño grupo de perdices blancas. La primera vez que las veía.
Una vez en este collado, cojo un senderó de pendiente descendiente y serpenteante hasta las instalaciones de la estación de esquí.
Una vez allí, un pequeño tramo de asfalto me lleva hasta el aparcamiento donde tengo la furgo.
Después de todo esto (mi relato y las fotos) no se si opinarás lo mismo que yo, cuando he dicho al principio que catalogada a la ruta como “fácil”. Si que es verdad, que ninguna ruta es fácil cuando se está a unes alturas mayores de los 2500 m., pero esta ruta se disfruta tanto y la dificultad técnica es tan poca, que hace que la ruta sea fácil, bonita y disfrutona.
MATERIAL QUE LLEVO EN MIS RUTAS DE MONTAÑA:
