Otra ruta entre niebla matinal, pero que eso no impida disfrutar del paisaje y del entorno para subir al Munt de Montsonís.
DESCRIPCIÓN DE LA RUTA. ¡EMPECEMOS A CAMINAR!
El día anterior, dejo aparacada la furgo en un extremo del pueblo, justo al lado de lo que creo que es una ET (estación transformadora). Me levanto con niebla…otra vez.
Me voy directo a la carretera que va hacia el pueblo y me alejo de él.
Cuando llego a un cambio de rasante, me desvío a la derecha cogiendo una pista.
La sigo, hasta llegar a un sendero estrecho y en alto marcado por mojones de piedra.
Éste va paralelo a la pista hasta que, disimuladamente, se va desviando de ella para girar 90º a la derecha. Voy pasando por diferentes “esculturas naturales” (trozos de trancos pintados).
Voy siguiendo el sendero hasta que me hace bajar para enlazar con una pista.
Otro giro de 90º a la derecha y empiezo a subir la pista con algo de pendiente.
Entre la niebla, puedo ver lo que es una explanada con un gran pino en el centro.
Escucho un sonido extraño entre toda la calma. Me giro a mi izquierda y es la bandera del pico que ondea. El pico lo tengo a la izquierda.
Me dirijo al sendero que está en uno de los extremos de esta explanada y lo subo hasta llegar al pico.
Las vistas…pues como la de éstos dias: más bien pocas. Así que fotos y video para documentar el pico y para abajo.
La bajada por el mismo sendero hasta llegar a la explanada y luego la pista para abajo.
Mi intención es, ya que estoy relativamente cerca, ir a visitar el Castillo de Montsonís. Así que para llegar a él, voy por pista de bajada, dejando la que llevo y cogiendo otras, senderos estrechos…hasta llegar a ver el castillo desde arriba.
Cruzo la carretera y me dirijo a él. El castillo está en un pequeño complejo alto y con algunas casas antiguas (alguna hace la función de restaurante).
Visitado el castillo desde fuera, me alejo de él en busca de la carretera.
Cuando llevo un rato, me desvío a la derecha, para coger un camino, que se transforma en sendero, el cual me lleva por diferentes puntos de interés, con diferentes niveles, hasta llegar a un pequeño pico subiendo a una zona alta desde donde veo el pueblo de Foradada.
Bajo hacia la pista por un sendero y luego ésta me hace llegar al pueblo.
Otro día que, a causa de la niebla, me quedo sin ver las vistas desde el pico. Pero no hay que lamentarse, porque en días así, mejor aprovechar lo que se ve, en este caso las figuras, la Naturaleza y el entorno, para pasar una buena ruta.
Como ruta, no es difícil tecnicamente, y una de las cosas que tiene bonitas, es poderla hacer con niñ@s, porque hay muchos imputs para ellos.
MATERIAL QUE LLEVO EN MIS RUTAS DE MONTAÑA: